Kendo
El Kendo (en japonés 剣道) es un arte marcial moderno enfocado en el uso del sable japonés al que se considera el heredero directo de varias escuelas antiguas de esgrima japonesas (ryu). Junto con el Judo, se considera que es el arte marcial y deporte más influyente en el desarrollo de la metodología, pegadogía y terminología de las artes marciales japonesas modernas. En la práctica del Kendo los estudiantes visten armadura (bogu) y se enfrentan entre ellos con sables de bambú (shinai). También practican kata con espadas de madera (bokken) donde, a través de los patrones fijos, los estudiantes mejoran su etiqueta, postura, actitud y forma de cortar correcta mientras preservan la técnica e historia de la esgrima japonesa antigua. El Kendo moderno no solo busca modelar el cuerpo, sino también el espíritu, fomentando en sus practicantes valores positivos como la cortesía, disciplina, humildad o espíritu de superación.
En marzo de 1975 la Federación Japonesa de Kendo establecía el propósito de la práctica del Kendo:
«El propósito de practicar Kendo es:
Moldear la mente y el cuerpo, cultivar un espíritu vigoroso y, a través de un entrenamiento correcto y riguroso, esforzarse por mejorar en el arte del Kendo, estimar la cortesía y el honor humanos para relacionarse con los demás con sinceridad y perseguir siempre el perfeccionamiento de uno mismo.
Esto hará que uno sea capaz: amar a su país y a la sociedad, contribuir al desarrollo de la cultura y promover la paz y la prosperidad entre todos los pueblos.«
Historia y orígenes del Kendo
El Kendo actual tiene sus orígenes en la antigua esgrima japonesa (kenjutsu) cuando, a principios del siglo XVIII, se desarrolló el kendo-gu (armadura protectora) junto con un método de entrenamiento que utilizaba el shinai (el sable de bambú) para poder practicar con seguridad. Posteriormente, ya a mediadiados de dicho siglo, surgieron los primeros métodos de enseñanza del kenjutsu que incluían el uso de un yelmo (men) en conjunto con el kendo-gu y el shinai. Esta metodología se hizo pronto muy popular y se extendió por todo Japón. Durante los primeros años del siglo XIX se fue perfeccionando no solo el equipamiento para este tipo de práctica, sino también la enseñanza y sistematización de las técnicas.
Tras la prohibición de portar espadas y el desmantelamiento de la casta samurai en la Restauración Meiji (1868) la práctica del kenjutsu decayó al verse como algo obsoleto. Sin embargo, los convulsos eventos de finales de siglo XIX (el periodo conocido como el Bakumatsu) trajeron de vuelta el kenjutu y en 1895 la Dai-Nippon Butokukai surgió como organización paraguas para promover las artes marciales en la era moderna.
En 1912 se crea la Dai-Nippon Teikoku Kendo Kata (posteriormente renombrada a Nippon Kendo Kata) para unificar y transmitir la esencia y técnicas de la espada japonesa a futuras generaciones. En 1919 Nishikubo Hiromichi reemplaza oficialmente el sufijo «jutsu» (técnica o arte) de las palabras «kenjutsu» y «bujutsu» por el «do» (camino), convirtiéndolas en «kendo» y «budo», dando mayor importancia a los aspectos educativos y espirituales de estas prácticas.
Después de la Segunda Guerra Mundial, durante la ocupación de los Aliados en Japón, el Kendo (junto con muchas otras artes marciales) fue prohibido. No fue hasta 1952 cuando se estableció la Federación Japonesa de Kendo y el Kendo resurgió, haciéndose popular y jugando un importante rol en la enseñanza y modo de vida japonés. Su práctica se extendió con rapidez fuera de las fronteras japonesas y en 1970 nació la Federación Internacional de Kendo. En la actualidad millones de personas practican Kendo por todo el mundo. En España el Kendo está promovido y regulado por la Real Federación Española de Judo y Deportes Asociados que forma parte de la Federación Europea de Kendo (EKF).
¿Quieres practicar Kendo con nosotros?
Cualquier persona, de cualquier edad o género, puede empezar a practicar Kendo. La práctica del Kendo es un ejercicio saludable que, poco a poco, hará que te pongas en forma mientras aprendes a controlar tu cuerpo y a manejar la espada.
No necesitas nada para empezar, solo ropa cómoda para hacer deporte. Más adelante, si decides continuar, sí que tendrás que invertir en comprar tu propia equipación (armadura, espadas de bambú y ropa).